Una de las discusiones sin fin en el mundo del fitness es la de comer en horas de la noche. Mucho se ha dicho al respecto, pero aún no hay verdad absoluta sobre si es perjudicial o beneficioso ingerir alimentos antes de irse a dormir.

Algunos expertos aseguran que después de las seis de la tarde no es necesario alimentarnos; otros creen que más importante que la hora es la cantidad y la calidad de la comida. Y puede que ambas teorías tengan razón, pues al final cada cuerpo responde de manera distinta a los mismos estímulos.

Sin embargo, en lo que si están todos de acuerdo es en que algunos alimentos pueden causarnos problemas si los consumimos en la noche. Para saber cuáles son, tendremos en cuenta la opinión de dos mujeres españolas especialistas en el tema: Beatriz Robles, tecnóloga de alimentos, y Andrea Marqués, dietista-nutricionista.

LAS FRUTAS

«De comer fruta por la noche se dice de todo, ya no solo que siente mal, sino que puedes engordar, algo que que es absolutamente mentira», señala Beatriz.

«Es cierto que hay alimentos que se digieren peor por la noche, lo que no es verdad es que, porque comas plátano o huevo, te vaya a sentar mal la cena», explica Andrea.

LOS CITRÍCOS Y LA ACIDEZ

«Lo que pasa con los cítricos, como ocurre con otros alimentos -como el café- es que a veces hacen que el esfínter que une el esófago con el estómago no cierre bien. Lo percibimos en la boca del estómago pero en realidad es la mucosa del esófago lo que se resiente», relata Robles.

La solución para no tener que prescindir de unos alimentos tan sanos en la cena: evitar tumbarse justo después de cenar, aunque sea para ver la tele.

LOS ALIMENTOS GRASOS

«Con algunos alimentos conviene esperar antes de irse a la cama, pero por una cuestión muy lógica y puramente funcional: si comemos alimentos muy grasos, la grasa retrasa el vaciado gástrico, es decir, los alimentos van a estar más tiempo en nuestro estómago», expone Marqués.

Si nos vamos a la cama inmediatamente o al poco rato, probablemente vamos a tener una digestión más pesada y es posible que nos despertemos o nos desvelemos.

CHOCOLATE, CAFÉ Y TÉ

«Cuando se habla de estimulantes se suele citar el té y el café, pero también lo es el chocolate por la teobromina que contiene. Estas bebidas son poco aconsejables para personas con reflujo gastroesofágico o gastritis. Es mejor que estos pacientes tomen por la noche infusiones digestivas», aconseja la tecnóloga.

Es sabido que conviene evitar los estimulantes antes de irse a dormir y que afectan más a unas personas que a otras. El alcohol tampoco es un buen aliado del descanso nocturno y la digestión.

VERDURAS, HORTALIZAS Y LEGUMBRES

«El problema de las legumbres es que pueden dar flatulencia. para muchas personas quizá no son la cena ideal para dormir bien. Limitar las crucíferas, como la coliflor, el brócoli o las coles puede ser una buena idea; mejor tomarlas a mediodía», advierte la dietista.



Mitos y Verdades de la Alimentación


Si una persona no está habituada a comer vegetales crudos, al principio tiene más gases porque está introduciendo fibra en grandes cantidades y tanto su aparato digestivo como las bacterias de su microbiota intestinal tienen que adaptarse. Con las legumbres pasa exactamente lo mismo.

COMIDAS PICANTES

Los alimentos picantes pueden generar los mismos problemas que los cítricos. Nuevamente, las nutricionistas aconsejan restringir su uso en la cena, pero solamente a las personas con problemas digestivos. No hay motivo para desaconsejarlos a quienes los toleran bien.

EMBUTIDOS

«El embutido es una carne procesada. Hay que evitar su consumo a cualquier hora. Se plantea el mismo problema si los comemos a las tres y nos tumbamos a dormir la siesta: pueden retrasar el vaciamiento gástrico, además de constituir productos que no es conveniente incorporar en una dieta saludable de forma habitual», aclara Beatriz.

El problema de este tipo de comidas no es que sienten mal, sino que no son especialmente saludables. Se trata de alimentos grasos, con la consiguiente repercusión en la digestión.

MÁS MITOS QUE VERDADES

Parece claro que hay más leyenda que verdad en las historias sobre alimentos que no debo comer en horas de la noche. «A veces queremos contar cosas muy originales o hacer dietas restrictivas cuando, al final, la base es siempre la misma: opta por alimentos saludables y preocúpate menos de si los estás comiendo a las a las 7 de la mañana, a las 8 de la tarde o las 10 de la noche», concluye Andrea.

Cuestión diferente es la existencia de intolerancias, alergias alimentarias, enfermedades digestivas o, simplemente, alimentos que sientan peor a unas personas que a otras.

Finalmente, debes tener en cuenta que no es lo mismo prohibir un alimento que aconsejar que se limite su consumo o se espere un tiempo prudencial antes de acostarse. La mayoría de las recomendaciones de las nutricionistas van en ese sentido.