La motivación es la mayor fuente de energía que conoce el cuerpo humano. Sin ella no hay acción de ningún tipo. Desde el impulso puntual por comprar un objeto que te guste hasta un cambio en tus costumbres más arraigadas, todo cuanto haces en la vida tiene un motivo de ser. Es la gasolina de tu cambio de vida, y si no la encuentras no llegarás ni a la esquina. A la hora de buscar una buena fuente de inspiración, es importante conocer sus dos tipos principales.

✔ Motivación Fría: Es aquella que se fragua poco a poco y que de manera constante nos empuja a lograr los objetivos. Es la fuerza más importante para la consecución de cualquier éxito, la que cada día nos empuja un poquito más hacia nuestro destino. Es una motivación que permanece intacta, te encarrila siempre hacia tu objetivo, sea ponerte en forma o sacarte una carrera, y te hace pensar a lo largo plazo.

✔ Motivación Caliente: Es fruto de un impulso, de un arranque de ganas, por ejemplo de verte bien en el espejo. Suele ser intensa, pero corta, y te lleva a comportamientos apresurados, atropellados, sin orden. La publicidad y el marketing son los principales artífices de ella.

La gran diferencia entre ambos tipos es que la fría procede de nuestro interior como fruto de una reflexión y una decisión tomada en firme, mientras que la caliente siempre viene de un impulso procedente del exterior. A pesar de lo dicho, no creas que la caliente es mala, al contrario. Si se sabe dominar puede llegar a ser muy poderosa. Yo mismo la utilizo en mi vida cotidiana, no reniego de ella e intento combinarla con la fría hasta encontrar el punto de equilibrio perfecto.

🎁 Los Incentivos

El entrenamiento deportivo está conformado por dos incentivos básicamente que están relacionados con los controles diarios, semanales, mensuales y anuales que debes realizar. En cada uno de ellos se obtiene un premio puntual, uno cada vez que haya evaluación, hasta que alcances la meta que te has propuesta. Estos son los dos tipos de incentivos que existen:

✔ El Inmediato: Es la satisfacción que todos tenemos al cumplir nuestro deber. Si a esta satisfacción le sumas la secreción de sustancias estimulantes de la felicidad que se produce en tu organismo cuando haces ejercicio, entonces obtendrás la sensación de estar pletórico cuando termines.

✔ Mediano-Largo Plazo: Coincide con la meta, el sentirse sano y atractivo ante los demás. El sentimiento de estar en forma es progresivo y a medida que aumenta esta sensación, se interioriza la motivación que necesitas para no desfallecer.