Existe un grupo de condiciones fundamentales en las cuales transcurre el entrenamiento del deportista. Siendo bien aplicadas, dan la posibilidad de alcanzar elevados resultados deportivos. Cada una tiene una vital importancia y afecta, directa e indirectamente, el rendimiento.

CONDICIONES SOCIALES DE LA VIDA DEL DEPORTISTA

Comprende al colectivo al que está permanentemente vinculado y donde, en mayor medida, se realiza el proceso educativo así como el aprendizaje, el trabajo, la actividad social, las condiciones materiales de vida, etcétera, todo lo cual debe tomarse en consideración durante el proceso de entrenamiento.

RÉGIMEN HIGIÉNICO

Comprende la distribución óptima del día, correcta alternancia del trabajo y el descanso, alimentación racional, higiene personal, etcétera. Son estas las condiciones más importantes para un entrenamiento productivo.

CONDICIONES NATURALES DEL MEDIO EXTERIOR

Siempre deben ser tomadas en consideración por el entrenador y el deportista. Muchos factores del medio exterior dificultan la realización de ejercicios físicos. Ellos se utilizan intencionadamente para intensificar su acción sobre el organismo del deportista.

No son pocos los factores del medio exterior que facilitan la realización de ejercicios deportivos. Tiene una importancia especial la realización de ejercicios del deporte practicado en condiciones semejantes a las de la competencia, directamente en el «campo de batalla» o en una situación complicada.

Deben tomarse en consideración las condiciones climatológicas en las cuales transcurre el entrenamiento. Por ejemplo, en los climas más calientes hay que entrenarse temprano en la mañana y al caer la tarde. Las condiciones climáticas en cierta medida influencian la periodización del entrenamiento y el calendario deportivo.

Pero no es obligatorio, y a veces incluso resulta contraproducente, entrenarse durante todo el año en condiciones semejantes a las competitivas.

Los mayores volumenes del entrenamiento, en especial en los periodos preparatorios, exigen la utilización de aquellas condiciones exteriores que ayuden a conservar la fuerza nerviosa, produzcan animación emocional, protejan músculos y tendones de tensiones innecesarias y cargas demasiado grandes.

La uniformidad de las condiciones exteriores, así como las del trabajo de entrenamiento, rebajan considerablemente la capacidad de trabajo del deportista. Es por ello que se recomienda entrenar en diferentes lugares y realizar frecuentemente competencias amistosas en el campo del contrario.

EL CALENDARIO DEPORTIVO

Desde un año antes determina el número de competencias, sus magnitudes y orientación y distribuye las competencias en ciclos anuales y para varios años, etcétera; tiene una considerable importancia como condición de los entrenamientos.

LAS INFLUENCIAS EMOCIONALES

Éstas (que bien pueden ser positivas y negativas) tienen una importancia no menor. Las conversaciones sobre la lucha deportivo que se avecina, la presencia y conducta de los aficionados y otras situaciones pueden elevar la capacidad de trabajo del deportista o rebajarla considerablemente.

LA MÚSICA DURANTE EL ENTRENAMIENTO

Esta sirve de ayuda al deportista para luchar contra la influencia de la uniformidad. Aquí no sólo se trata de una mejoría emocional, que de por sí es muy importante, sino de la supeditación al ritmo de la música; facilitando la prolongada realización de los trabajos cíclicos y ayudando a superar el agotamiento creciente.

Las investigaciones científicas han demostrado que la música, sobre todo la ligera y rítmica, influye positivamente sobre la capacidad de trabajo y los procesos recuperativos. Lamentablemente, la música se utiliza poco en los entrenamientos, y en muchos casos ni siquiera se utiliza.