En la proyección del trabajo con sobrecargas con fines de desarrollo físico no es necesario el establecimiento de macrociclos con períodos preparatorios, competitivos y transitorios como en otros fines (levantamiento de pesas, deporte auxiliar, etc.).

Sin embargo, se hace necesario estructurar ciclos de preparación donde se establezcan los valores de las cargas a realizar y demás aspectos orientadores para el trabajo en cada mes, semanas y días. Las tareas metodológicas que en cada etapa puedan realizarse estarán en dependencia de los objetivos que nos hayamos trazado.

En estos heterogéneos grupos de personas hay diferentes necesidades e intereses en el mejoramiento de su físico, generalmente relacionadas con la función social que realizan. Le denominamos a tales necesidades e intereses conjuntamente con los niveles físico-morfofuncionales alcanzados, «problemas de desarrollo físico».

En la medida que se conjuguen adecuadamente los intereses, las necesidades sociales del individuo y sus niveles reales físicos, morfológicos y funcionales, se puede desarrollar un proceso objetivo de preparación del desarrollo físico. De aquí que cada técnico de Cultura Física, mediante una verdadera comunicación con sus usuarios y utilizando métodos pedagógicos, debe lograr que los intereses de cada sujeto se correspondan con los demás factores del problema.

En dependencia del problema de desarrollo físico, cada técnico en comunicación con el usuario trazará los objetivos a seguir en el proceso de preparación. El contenido que se planifique podrá desarrollarse mediante diferentes métodos, con los medios de las sobrecargas y conjugándolos como una necesidad del proceso, con otros de la Cultura Física (Gimnasia, Atletismo, Juegos, etc.).

Es una particularidad del trabajo con sobrecargas la individualización de la actividad, por lo que independientemente de que se elabore un programa general, es necesario la planificación individual, la cual, mediante los diferentes controles se podrá ajustar en función del éxito esperado.

Entrenamiento con Sobrecargas

Las etapas mensuales estarán dadas por un número de semanas convenientemente preestablecidas en correspondencia con el problema de desarrollo físico y los objetivos que se tracen. Estas etapas mensuales podrán tener de 2 a 6 semanas.

Las tareas metodológicas que en cada etapa mensual se puede realizar en correspondencia con los objetivos propuestos son variados por su esencia. En tal sentido, relacionamos las tareas metodológicas que, en el empleo de las sobrecargas para el desarrollo físico en personas sanas no deportistas, se pueden realizar en las diferentes etapas mensuales:

1. Preparación previa al trabajo de las sobrecargas.
2. Adaptación al trabajo con sobrecargas.
3. Restablecimiento de la fuerza muscular.
4. Incremento de la fuerza general.
5. Incremento de la fuerza especial.
6. Conservación de los niveles de fuerza alcanzados.

La preparación previa al trabajo de las sobrecargas se establece para aquellos sujetos de bajo desarrollo físico que nunca han realizado las actividades con sobrecargas, donde utilizando otros medios de la Cultura Física (sin sobrecargas) se logre un amplio desarrollo físico general.

La adaptación al trabajo con las sobrecargas prevé en su esencia, el comienzo de la etapa inicial de desarrollo físico con sobrecargas, para aquellos sujetos con algún desarrollo de la preparación física general que no hayan realizado sistemáticamente actividades con sobrecargas, o para los que con pobre desarrollo de las capacidades motrices hayan concluido la preparación previa.

Las tareas estarán dirigidas a familiarizarse con los ejercicios, con los términos y una adecuada adaptación de la influencia de los medios de las sobrecargas. El restablecimiento de la fuerza muscular se destina a los usuarios que después de concluir un descanso activo necesario sin sobrecargas, necesiten restablecer sus mecanismos de adaptación.

Etapas del Desarrollo Físico

El incremento de la fuerza general se realiza en aquellos individuos que están en condiciones de incrementar sus índices de fuerza general, correspondiendo generalmente a la mayor parte del ciclo, donde es necesario al inicio, utilizando cargas entre el 40-60% del resultado máximo en los ejercicios objeto de trabajo, se incremente el volumen y el tono muscular, creando condiciones para la resistencia muscular, incremento de la actividad neuromuscular, mejoramiento de la capacidad física de trabajo, etc.

Después de algunas etapas mensuales con las cargas descritas es necesario incrementar hasta niveles medios la intensidad de la carga (entre el 70-85% del máximo) y finalmente incrementar la intensidad (mayor o igual al 90%) para sobre la base de las cargas precedentes incrementa al máximo relativo la fuerza muscular.

Deben ser utilizados en esta etapa la mayor cantidad de ejercicios con sobrecargas para todos los planos musculares.

El incremento de la fuerza especial se realiza en aquellos individuos que necesitan dado el problema de desarrollo físico, lograr elevados índices de fuerza en relación a su actividad social concreta.

Durante esta etapa es de vital importancia la mantención de la fuerza general alcanzada, sobre todo para aquellos músculos que menos participan en las actividades específicas del sujeto.

Las tareas de conservación de los niveles de fuerza alcanzados se dan en la etapa que media de un ciclo desarrollo físico a otro, los medios utilizados generalmente corresponden al atletismo, la gimnasia y los juegos.